domingo, 12 de diciembre de 2010

No soy tu fuego

¿Cómo explicarle a un huracán
que está prohibido encender mi fuego?
¿Cómo decirle, en su carrera,
que en nuestro ardoroso tormento,
en un soplo, en una llamarada,
inconscientes y ciegos,
quemamos, en el intento,
el alma de otro corazón.
Estoy enamorada amigo mío,
de pecho abierto y carnosa boca.
Pero mi amor, desde hace tiempo
es de otro pecho y otro aliento.
No soy tu musa, ni tu mortero.
No soy tu mujer, ni tu aventura.
Soy herida de fuego y tus cenizas,
soy tu verdad engalanada
y mi mentira descarnada.
Ciega de pasión y de despecho,
me sumergí por un momento
en tu encanto de bohemio.
Pero hay otro mundo a mi espera
y he dañado su esperanza.
Ayer, por tus palabras, embriagada
rompí en mi delirio, su corazón de niño.
Acorralada por el dolor de su ausencia
olvidé, sin freno, mi viejo juramento.
Sin su aliento, ni sus ojos,
traicioné contigo su confianza.
Hoy, abandonada a mi resaca,
sobrevivo al remordimiento,
y no debo envenenar tu inocente mañana.
Que me perdonen los dos…
a nadie quiero dañar.
Por eso rompo la esperanza
de esta historia no iniciada.
Este amor virtual es imposible,
es un mundo de ilusiones
que no tiene más caminos.
Mi realidad es otra…otra boca y otra historia.
¿Cómo decirte, amigo mío que no puede seguir
esta pasión, surgida de la nada?
Pero tu mente me apasiona, me inspira, me ata.
Ojalá, mañana, ya curado de ilusiones,
perdones mis deseos, mis impulsos, mi desliz
Y podamos ideas y poemas compartir.
Pero los vientos nunca más, los fuegos se apagarán.
No puedo tener tus pasiones, ni ser parte de tu vida.
Tampoco hacer fogatas con tu soplo de sabio viejo.
No puedo ser tu chispa, ni tu fénix, ni tu fuego.
No puedo estar en tus días, mucho menos en tus noches.
No puede mi vientre de otro hogar contener tu viento.
Perdona, amigo mío, perdona, que lo siento.
Siento perder el vino, las flores y los sueños.
Agradezco el chocolate, el queso fuerte, el jugueteo.
Agradezco tus ojos dulces, tus caricias y tu genio.

No hay comentarios:

Publicar un comentario