sábado, 9 de abril de 2011

Guerrillero

¿Qué quieres, guerrillero, que yo haga con tus luchas?
Provocas y me invitas a conquistar tus felonías.
Te dices guerrillero de espíritu indomable,
fiel a tus empeños de libertad y de aventura.
Salvaje y agreste es la tierra de tu mente,
pero quieres que esta bruja te envuelva en un conjuro,
que te salve de ti mismo,
que te ate ya a mis muslos.
Me dices tentadora y eres tú el instigador,
de mi vientre y mis deseos,
de mi mente y mis anhelos.
La libertad no cuestiona, amar es libertad.
Y me pides que escale tu cumbre borrascosa,
y me adviertes que tu alma oscila con el viento,
no me pidas que rasguñe, con mis uñas, tu deseo,
recuerda que soy mortero, soy volcán y tu fogata.
Juegas con el fuego y en el fuego de mi alma,
animal herido, pantera de mis sueños,
aprende de una vez que no quiero enjaularte:
Yo también soy aventura, espíritu indomable.
Quieres ser vencido de forma intermitente,
acepto la dulzura de este duelo tan demente,
Sólo pido que te entregues fiel y por completo,
que me des tus afectos, tus deseos, tus lamentos.
Sé desde un principio que serás mi perdición,
que tu llegada y tu partida no será mi decisión,
pero no entiendo la vida sin amar, sin admirarte,
sin estos momentos de perfecta inspiración.
Aunque partas luego y leves ya tus anclas,
quiero la certeza de tu entrega y mi confianza.
Cuando estés y mientras dure seré tu hechicera,
y tú mi ángel de siempre, de hoy y de nunca.
Pero a cambio te pido también tu admiración,
tu respeto y tu alegría, tu veneración.
¿Será capaz tu alma del esfuerzo y la renuncia?
¿O quizá el miedo, sin saberlo te paraliza?
Quizá al guerrillero le atemoriza la contienda,
el riesgo de ser vencido, ciego y sin medida,
Y prefiere levar anclas, hacia el horizonte,
antes de romper una promesa ya perdida.
Pero, la dulzura de esta guerra nos lleva a un empate:
Si te entregas no estarás ni en contienda, ni en combate.
Seguirás siendo marino, buscando horizontes,
Y yo, el puerto de destino, una isla flotante.

No hay comentarios:

Publicar un comentario